La era del trabajador conectado lleva mucho tiempo en camino. Comenzó en la década de los 90s con la llegada de tecnología móvil más accesible que conectaba de forma inalámbrica a personas de toda la planta, en todo el mundo. Gradualmente, durante las últimas 2 décadas, el Internet de las Cosas en la Industria ha permitido que un gran número de máquinas puedan comunicarse entre sí casi instantáneamente. El siguiente paso lógico para los fabricantes es fusionar humanos y máquinas.
Y ese momento es ahora.
Si bien nos gustaría pensar que es por que el chip cerebral de Neuralink financiado por Elon Musk para la fusión mental con IA finalmente está disponible comercialmente (no lo está), o porque estamos a punto de ingresar a la Matrix (eso es al menos cinco años después), pero la razón real es mucho más realista y fácil de entender.
Las plantas, las fábricas y los servicios públicos finalmente tienen esa interfaz humano-máquina que cumple con sus estrictos estándares de seguridad y resiste sus entornos hostiles: la Tablet industrial Corporal HMT-1 de RealWear, 100% manos libres y de grado industrial.
Así como Apple definió la forma y función de los smartphones en todo el mundo, así esta Tablet Corporal define los estándares para los dispositivos portátiles en la industria.
Dentro de su forma, que pareciera una corona de laurel de alta tecnología y que además puede acoplarse a un casco de seguridad o una gorra, podrás encontrar todo lo que esperarías de una tablet: un chip Snapdragon 625 de 8 núcleos, un sistema operativo Android 6.0.1, una cámara de 16 megapixeles (video a 1080p), un conjunto completo de sensores (acelerómetro de 3 ejes, magnetómetro y giroscopio) y una batería intercambiable en caliente que dura una jornada laboral completa. Su visor ajustable contiene una pantalla monocular que es visible como si fuera una tablet de 7 pulgadas. Esto le permite reproducir videos, ver instrucciones de trabajo o utilizar realidad aumentada.
El diferenciador clave contra otros dispositivos móviles, aparte de que se monta en la cabeza, es que no solamente no cuenta con pantalla táctil, en realidad no hay necesidad de tocar nada. Su sistema de reconocimiento de voz responde a la perfección todos los comandos, desde grabar un video profesional hasta contactar al cuarto de control. Incluso en un entorno con 95dB, el sistema puede reconocer los comandos sin problema.
Debido a sus múltiples tareas y que se encuentran en constante movimiento, los trabajadores industriales necesitan de las tablets corporales para tener en todo momento sus mano libres.
SDI trae esta grandiosa Tablet Corporal que te permitirá no solo ser más eficiente, si no estar alerta ante cualquier posible contingencia que pueda ocurrir y puedas actuar de manera rápida, segura e inteligente.